lunes, 17 de mayo de 2010

QUERER A QUIEN NO TE QUIERA

Querer a quien no te quiera
a eso se llama querer,
pues querer a quien te quiera
se llama corresponder
y eso, lo hace cualquiera.

Escuché esta vieja copla hace unos días en un Festival de Flamenco y medité que, más allá de hablar de amores no correspondidos, lo que expresa tiene un claro paralelismo con las palabras de Jesús, que podemos leer en el Evangelio, cuando nos dice amad a vuestros enemigos y rogad por los que os persiguen pues si amáis a quienes os aman o hacéis el bien a los que os lo hacen a vosotros ¿qué mérito tenéis? Eso lo hacen los pecadores, los publicanos, –¡eso lo hace cualquiera!–

Pero ¿es posible amar a los enemigos, a los que nos persiguen, a los que nos combaten porque pensamos de forma diferente? Nuestros sentimientos nos llevan a sentir antipatía, aversión, incluso odio a nuestros enemigos por lo que hacen y aquí es necesario que distingamos entre las acciones que consideramos malas y quienes las ejecutan. Amar al enemigo no significa que aceptemos como bueno lo que hace, ni que cambiemos nuestra aversión en simpatía, ni que tengamos que sentir cariño, sino una decisión consciente por la cual queremos buscar su bien en la medida en que podamos.

Amar al prójimo como a nosotros mismos significa que el bien que deseamos y buscamos para nosotros, tenemos que desearlo y buscarlo para los demás, amigos o enemigos. El problema se plantea cuando lo que deseamos para nosotros no es nuestro propio bien, sino la satisfacción de nuestro egoísmo, de nuestra codicia, de nuestra vanidad o de nuestra soberbia. Todo esto no es el bien y nos enfrenta con los demás.

Pero si entendemos que nuestro propio bien es el pleno desarrollo de todas las potencialidades que Alguien puso en nosotros, podemos desear y buscar lo mismo para los demás, incluidos nuestros enemigos. Lograr nuestro pleno desarrollo como personas exige dominar nuestra naturaleza, que tenderá a satisfacer los bajos instintos, en una lucha en la que a menudo resultaremos derrotados. Tomar conciencia de nuestras caídas, de nuestros errores, de nuestros pecados nos llevara a ser humildes y necesitados de perdón. Creernos buenos y perfectos es la mayor de las equivocaciones.

¿Si nos descubrimos frágiles y pecadores, cómo condenamos a los demás? La oración del Padre nuestro incluye una petición de perdón, que estamos seguros de obtener en la misma medida que perdonemos a los demás.

Por otro lado Jesús nos advierte de que no debemos juzgar a los demás. Pero ello no nos impide juzgar los hechos y rechazar los que consideremos malos. Nos resulta difícil condenar un hecho o una situación, sin condenar al mismo tiempo a sus causantes, pero eso es lo que se nos pide. Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen y estaban clavándolo en la cruz.

Amar a los enemigos, sin juzgarlos ni condenarlos, no significa que dejemos de luchar por la verdad, el bien y la justicia, pero sin olvidar nunca nuestra íntima relación con ellos: todos pecadores, todos necesitados de perdón.

Es difícil, no cabe duda, pero el amor de Dios, que es don y regalo, vendrá en nuestra ayuda si aceptamos las palabras de Jesús y lo seguimos.

Francisco Rodríguez Barragán



http://elguadalope.es/2010/03/24/querer-a-quien-no-te-quiera/
Publicado en Bitácora de Rebelión Digital el 25-03-10
Publicado en Análisis Digital el 27-03-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=46812&idNodo=-5
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/7682/2010-03-24.html
Publicado en Forum Libertas el 31-03-10
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=16628
Publicado en Diario Siglo XXI el 26-03-10

EL DESPOTISMO DEMOCRÁTICO

No fue Nostradamus quien profetizó sobre nuestra situación actual en una cuarteta apócrifa que anda circulando por el correo electrónico, fue Alexis de Tocqueville quien, en 1840, anticipó la deriva de las democracias hacia el despotismo. Merece la pena leer su obra La democracia en América II, en cuya parte cuarta reflexiona sobre la influencia que ejercen las ideas y los sentimientos democráticos sobre la sociedad política.

Dice Tocqueville que las opiniones de los pueblos democráticos en materia de gobierno favorecen la concentración de poderes. El sentimiento igualitario hace que los individuos aparezcan cada vez más pequeños, más perdidos en la masa, y al mismo tiempo más inclinados a invocar a un poder único y providencial que intervenga y resuelva todos los problemas. Esto es lo que estamos viviendo. La soberanía del pueblo se reduce a que la masa de los individuos es llamada cada cierto tiempo a emitir un voto, pero esa misma masa espera que el gobierno lo resuelva todo: relaciones de trabajo, salarios, vivienda, sanidad, educación, industrialización, finanzas, justicia…

El Gobierno lo es todo, aunque se fraccione en un gobierno central y diecisiete gobiernos autonómicos, el poder total esta concentrado en cada uno de ellos a través de un intervencionismo creciente. Los ciudadanos son nada más que un voto, que cada vez utilizan menos. Entre gobierno y gobernados la distancia es inmensa. Los poderes intermedios desaparecen absorbidos o controlados por el poder.

También advirtió Tocqueville que en los estados democráticos aumenta el número de tribunales, pero el gobierno escapa de legitimar su poder con otro poder que le sirviera de contrapeso, escogiendo él mismo a los jueces. No hay duda de que acertó.

En la misma medida que crece el poder del gobierno los ciudadanos van siendo despojados de sus derechos. Sin ninguna revolución sangrienta, de forma paulatina, se va imponiendo el despotismo. El gobierno legitima sus acciones proclamando que lo hace en beneficio del pueblo, pero realmente actúa sin el pueblo. Pensemos que invocando la seguridad se intervienen conversaciones telefónicas, o hay que someterse a registros crecientes en los aeropuertos, o a ser filmados sin nuestro consentimiento. Invocando el derecho a la educación se priva a los padres de elegir la educación que desea para sus hijos mientras se imponen asignaturas adoctrinadoras, etc. El gobierno presume de extensión de derechos y de nuevos derechos, pero en realidad se recortan los derechos de los padres, de la familia, de las instituciones no dependientes del Estado.

El despotismo, escribió Tocqueville, me parece el mayor peligro que amenaza a los tiempos democráticos, pues por encima de los ciudadanos se alza un poder inmenso y tutelar que vela por nuestra felicidad y nuestra suerte, pero que en lugar de preparar a las nuevas generaciones para la responsabilidad y la independencia, los fija irrevocablemente en la infancia; este poder quiere que los ciudadanos gocen, con tal de que no piensen en otra cosa que en gozar. Tocqueville quizás no imaginó las acciones de nuestro gobierno para difundir el hedonismo de una sexualidad promiscua e irresponsable y el reparto masivo de
preservativos, pero acertó plenamente en su diagnóstico.

En esta tarea de hacer felices a los ciudadanos, añade Tocqueville, el poder quiere ser el único agente y juez exclusivo; provee a su seguridad, atiende a sus necesidades, pone al su alcance los placeres, conduce sus asuntos y se pregunta si no podría librarles por entero de la molestia de pensar y del derecho de pensar y del trabajo de vivir. ¿No es acaso todo ello lo que está ocurriendo aquí y ahora?

El camino de servidumbre hacia el despotismo está bien avanzado, pero los ciudadanos no parecen percatarse de que están siendo despojados de sus derechos fundamentales a cambio de que se le asegure la vida desde la cuna a la tumba. Cuando el llamado estado del bienestar hace aguas por la crisis, quizás es el momento de despertar para tomar cada cual la responsabilidad de su propia vida, rechazando la intromisión asfixiante del poder y sus designios de cambiar a su antojo nuestras vidas. El aviso de Tocqueville no debemos ignorarlo.

Francisco Rodríguez Barragán

http://elguadalope.es/2010/03/31/el-despotismo-democratico/
Publicado en Análisis Digital
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=46972&idNodo=-5
Publicado en Rebelión Digital el 02-04-10
Publicado en diario siglo XXI el 08-04-10
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/54293
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/7874/2010-04-05.html

JAQUE AL PAPA

La feroz campaña contra Benedicto XVI, en base a determinadas conductas reprobables de clérigos pederastas, tiene como objetivo, no tanto que se haga justicia, sino ajustar cuentas con la Iglesia, única voz que se levanta en el mundo para refutar las arteras maquinaciones de quienes desde la ONU, sus organismos y conferencias, pretenden establecer una nueva ética mundial en la que el bien y el mal no sean valores permanentes y universales, sino inventos de “los expertos” que han ido poniendo en circulación “nuevos derechos”, bajo eufemismos engañosos, que buscan, entre otras cosas, legalizar el aborto, la eutanasia y el placer sin límites, sustituir el sexo por el género, la familia por cualquier modelo de convivencia, difundir la ecología como reducción de la población para “salvar el planeta”, etc.

Benedicto XVI ha tenido el valor de señalar en su encíclica Caritas in veritate todas y cada una de las falacias que pretenden imponernos desde los altos organismos internacionales, a los que le habrá sido especialmente molesta la indicación del Papa de que deberían preguntarse sobre la eficacia real de sus aparatos burocráticos y administrativos en orden al desarrollo de los pueblos, afirmando seguidamente que el destinatario de las ayudas resulta útil para quien lo ayuda y, así, los pobres sirven para mantener esos costosos organismos, que destinan a su propia conservación un porcentaje demasiado elevado de los recursos que deberían ser destinados al desarrollo. Por ello pide, tanto a estos organismos internacionales como a las organizaciones no gubernamentales, que rindan información sobre el destino de los recursos que reciban, con indicación expresa de lo que se destina a los programas de cooperación y a gastos de administración.

Sobre la ecología y el cambio climático, que parece ser la bandera de las influyentes minorías de “expertos” que controlan los altos organismos internacionales, el Papa afirma que la Iglesia tiene una responsabilidad respecto a la creación y la debe hacer valer en público. No solo debe defender la tierra, el agua y el aire como dones que pertenecen a todos, sino que debe proteger al hombre contra la destrucción de sí mismo, pues como subraya en otro lugar es contrario al verdadero desarrollo considerar la naturaleza como más importante que la persona humana misma.

Frente a la exitosa marcha de las minorías influyentes que pretenden construir el mundo a su antojo, la figura y la voz de Benedicto XVI, hablando como cabeza de la Iglesia y recordando que hay valores eternos e irrenunciables como la caridad y la verdad, representa un obstáculo a eliminar y han encontrado en la pederastia de algunos clérigos una munición utilizable.

Lo más triste y lamentable es que haya quienes, diciéndose cristianos y dentro de la Iglesia, busquen notoriedad atizando la campaña en nombre de un estrafalario progresismo quiere imponer sus teorías sobre el celibato, la ordenación de mujeres o la democratización en la elección de obispos, incluso algún teólogo cuestiona la figura del Papa, sin duda por estar convencido de que el infalible es él.

Pero la Iglesia fue fundada sobre la roca de Pedro por Jesucristo y estoy seguro de que resistirá todos los embates y saldrá purificada de cada una de las situaciones que tenga que enfrentar.

Francisco Rodríguez Barragán

http://elguadalope.es/2010/04/08/jaque-al-papa/
Publicado en Rebelión Digital el 08-04-10
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/7948/2010-04-08.html
Publicado en Análisis Digital el 09-04-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=47111&idNodo=-5
Publicado en Diario Siglo XXI el 14-04-10

CONTRA LA DICTADURA DEL CONFORMISMO

Ha recordado el Papa que padecemos la sutil dictadura del conformismo, que nos obliga a pensar como piensan todos y a actuar como actúan todos.

Que se trata de una verdadera dictadura, salta a la vista cuando se busca silenciar y agredir a la Iglesia porque no comparte la propaganda de quienes quieren imponer su pensamiento único sobre lo políticamente correcto, sobre los “nuevos derechos”, sobre el lenguaje manipulado, sobre la ideología de género, sobre la sexualidad como placer sin restricciones, sobre la naturaleza por encima del hombre, sobre la indisponibilidad de la vida.

Si los cristianos nos resistimos a esta dictadura del progresismo, seremos excluidos de todos los foros, motejados de inmovilistas, hasta de enemigos de la humanidad, carcas, fascistas, meapilas y otros insultos al uso.

Pero lo más grave es que muchos cristianos se asustan, quieren aparecer también como “progresistas”, de no se qué progreso, y quisieran que la Iglesia llegara a algún tipo de compromiso con el mundo, pensando que así nos aceptarían en los más altos y manipulados organismos.

Por eso dice el Papa que "hoy tenemos miedo de hablar de la vida eterna. Hablamos de las cosas que son útiles para el mundo, mostramos que el cristianismo ayuda también a mejorar el mundo, pero no nos atrevemos a decir que su meta es la vida eterna y que de la meta vienen luego los criterios de la vida”.

Efectivamente, apenas si se habla de la vida eterna a no ser en las homilías de las misas de los entierros. Hay cristianos que se esfuerzan en demostrar que trabajan por hacer un mundo mejor, pero no aclaran que su meta es la vida eterna y que la única forma de alcanzarla es amando a los demás como Dios nos ama, buscando activamente el bien de todo hombre y de todos los hombres y que este amor que recibimos de Dios para vivir en el mundo es el criterio que inspira nuestras vidas.

Es la vida eterna con Dios la que se ofrece a quienes vivieron amando a los demás y trabajando por la verdad y la justicia y es la vida eterna sin Dios, la que espera a quienes hicieron lo contrario. Esto es más serio que el Código Penal. Desgraciados quienes piensen que no se les pedirá cuenta de su vida.

No es posible para un cristiano, que quiera vivir como tal, el conformismo con el mundo cuyos valores son el placer y el tener, que cree que puede decidir sobre todo: el bien y el mal, la naturaleza y el hombre, con plena autonomía, para lo cual tienen que borrar a Dios del horizonte y elevar a instancia última y definitiva, el consenso de la inconstante mayoría y este consenso puede ser consenso para el mal, como dice el Papa.

El voto de la mayoría entrega el poder a un partido y el elegido se cree en posesión de la verdad para conseguir aprobar leyes que deciden quién debe vivir y quién no, cómo deben ser educadas las nuevas generaciones, cómo debe vivirse la sexualidad, en qué lengua tiene que hablar, cuál es su historia, cómo expresar sus sentimientos religiosos, etc. Todo apoyado por un enorme aparato de agitación y propaganda.

Por desgracia, no tenemos la seguridad de que si el voto de la mayoría entrega el poder a un partido distinto la situación cambie sustancialmente.

Ahora más que nunca los cristianos tenemos que hablar de la vida eterna, de que hay que obedecer a Dios antes que a los hombres, de que no se puede construir un mundo fraterno sobre el egoísmo sino sobre el amor. No hay que colaborar con la dictadura del conformismo, sino proclamar en cualquier tiempo y lugar el mensaje de Jesús, cuya muerte y resurrección, es la única realidad que puede salvar al mundo. ¡No tengáis miedo!

Francisco Rodríguez Barragán

http://elguadalope.es/2010/04/20/contra-la-dictadura-del-conformismo/
Publicado en Bitácora de Rebelión Digital el 21-04-10
Publicado en Análisis Digital el 24-04-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=47351&idNodo=-5
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/8301/2010-04-24.html
Publicado el 26-04-10 en F.Libertas
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=16850
Publicado en Diario Siglo XXI el 22-04-10
http://vivificar.blogspot.com/2010/04/contra-la-dictadura-del-conformismo.html

PREOCUPADOS

Me preocupa la situación que atravesamos: el paro que afecta a tantas familias, la difícil situación económica, la deuda creciente, la falta de medidas que terminen con el despilfarro y la corrupción, con la ineficiencia y endeudamiento de nuestro sistema autonómico y municipal, con la falta de competitividad de nuestras empresas y un largo etcétera.

Pero también me preocupa y desazona que el Gobierno, en lugar de aprestarse a resolver los problemas, se dedique a crear otros: deslegitimar la transición y destruir las bases de nuestra convivencia, desenterrar los fantasmas del pasado y tratar de reescribir la historia, imponer la ideología de género y la sexualidad libre, destruir la familia y reivindicar para el Estado el derecho exclusivo de educar a las nuevas generaciones en sus disolventes postulados; inventar la alianza de civilizaciones para abrir las puertas al Islam, mientras nos amenaza con una próxima ley de libertad religiosa que, sin duda, será restrictiva y contraria a la Iglesia Católica.

Hay quien dice que el Gobierno trata con estas cosas de distraer la atención de los verdaderos problemas de la nación. No lo creo, ya que su tarea demoledora empezó en tiempos de bonanza económica, cuando solo unos poco alertaban de los peligros de nuestra economía.

Pienso que el designio de Rodríguez Zapatero, desde que llegó al poder, es el de mantenerse en él a toda costa. Para él solo la izquierda tiene derecho a gobernar, por lo que no acepta, aunque no lo diga, que en la democracia ha de darse necesariamente la alternancia de partidos. El camino que le resulta más fácil para su designio es la eliminación del adversario, para eso busca la vuelta al pasado, al más negro pasado de nuestra historia, del que espera sacar el provecho de una revancha en la que hacer cargar a la derecha con todas las maldades, reales o inventadas, del franquismo y a la izquierda con todos los méritos, y hacer una segunda transición a su gusto, cambiando el régimen que nació con la Constitución del 78.

Las manifestaciones callejeras de la izquierda, con el pretexto de apoyar al Juez Garzón, frente al Tribunal Supremo, no les preocupa la justicia, han mostrado su verdadero motivo: la deslegitimación de las instituciones como paso previo a una solapada acción revolucionaria.

Frente a una derecha acomplejada y vituperada por sus propias corrupciones, se va alzando una izquierda envalentonada y rencorosa que se dice “progresista” pero que vuelve a los años treinta del siglo pasado, para agitar las aguas del odio. La debacle económica puede ser el caldo de cultivo adecuado para sus designios. Decía Rodríguez Zapatero a Gabilondo, en las pasadas elecciones, que le favorecería que hubiera tensión, pues bien, ésta ya ha empezado.

Creer, como creen el Sr. Rajoy y sus consejeros, que el desgaste por los problemas económicos de este Gobierno le va a servir en bandeja la victoria en las próximas elecciones, me parece arriesgado. Hay por delante dos años en los que se atizará la tensión todo lo posible. ¿Qué podemos hacer? ¿Quién logrará poner algo de cordura?
El antifranquismo militante, ¡después de casi cuarenta años de muerto Franco!, sólo busca establecer un peligrosa razonamiento: la amnistía, la transición, la constitución la hicieron los franquistas y la izquierda tuvo que aceptarla a la fuerza, por tanto las instituciones que de allí nacieron, incluida la Corona, hay que destruirlas, ahora que la izquierda está fuerte.

Los que vivimos con ilusión aquellos años, sabemos que todo aquello se hizo para superar y enterrar un pasado de enfrentamientos, aunque la organización autonómica que se plasmó en la Constitución no haya conseguido resolver el problema catalán y vasco, sino que lo ha radicalizado y extendido a todas las regiones de España, pero no parece que a nadie le interese poner fin a la costosa e insolidaria deriva autonómica y en cambio hay demasiada gente interesada en acabar con la misma Constitución.

¿Qué nos espera? Creo que hay motivos suficientes para estar preocupados.

Francisco Rodríguez Barragán

http://blogs.laopiniondemurcia.es/murcialiberal/2010/04/27/cartas-a-murcialiberal-preocupados/
http://elguadalope.es/2010/04/28/preocupados/#more-12879
Publicado en Diario Siglo XXI y Análisis Digital el 29-04-10
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/55160
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=47482&idNodo=-5
Publicado el 03-05-10 en Camineo.info
http://www.camineo.info/news/138

LOS MAYORES

El Boletín monográfico nº 7 del Instituto de Política Familiar está dedicado a los Mayores en España. Lo he leído con atención pues, aparte de aportar datos interesantes, me afecta como viejo, pues dedica su capítulo tres al Futuro de la Población Mayor y es interesante conocer lo que nos aguarda, aunque sea por vía de proyecciones estadísticas.

El capítulo primero describe, como marco general, la situación de la Población Española hoy, que ha tenido un aumento notable de casi cuatro millones de personas en los últimos cinco años, crecimiento debido a la llegada de extranjeros y no al aumento de la natalidad de los españoles.

Señala que en la actualidad la esperanza de vida al nacer alcanza los 81 años, mientras que la esperanza de vida de los que tienen 65 años es de casi 20 años, es decir que llegarán a los 85. Uno de cada 6 españoles es hoy mayor de 65 años con casi ocho millones de personas y los mayores de 80 años superan ya los 2,2 millones de personas.

Aunque Italia, Alemania y Grecia tienen mayor proporción de personas mayores, es nuestro país el que está envejeciendo con más rapidez, convirtiéndose en una nación vieja con más mayores que jóvenes, con un déficit de natalidad creciente a pesar del aumento de población y de la inyección de natalidad de las madres extranjeras.

Hace en el capítulo dos un análisis de la población mayor por Comunidades Autónomas. Andalucía, Cataluña, Madrid y Valencia son las comunidades con mayor población de personas mayores, pero son Castilla y León, Galicia y Asturias las que tienen el porcentaje más alto de mayores.

El capítulo tres habla del futuro de la Población Mayor, que está creciendo de forma vertiginosa, con un crecimiento de más de un 60 por ciento respecto al resto de la población. Con las tendencias actuales para el año 2050 supone que la población española alcanzará más de 53 millones de personas de los que un tercio aproximadamente, 17 millones, serán mayores de 65 años y de ellos nada menos 6 millones serán mayores de 80 años. La pirámide de población estará absolutamente invertida. El sistema público de pensiones y protección social estará en riesgo de resultar insostenible.

Para los que somos mayores hoy, el año 2050 nos cae un poco lejos, pero no así para nuestros hijos y nuestros nietos que se podrán encontrar con una situación difícil. No obstante estas anticipaciones a largo plazo, basadas sólo en tendencias estadísticas, en un mundo que se globaliza, sometido a crisis, migraciones y cambios de todas clases, pueden resultar erróneas. De todas maneras se está produciendo ante nuestros ojos un desequilibrio demográfico en el que aumenta la esperanza de vida de los mayores y disminuye la esperanza de vida de los niños concebidos y abortados o se propagan medidas anticonceptivas que están lastrando la natalidad de los países de Occidente.

En el capítulo cuatro se analizan las características de las personas mayores. El 41 por ciento viven en matrimonio, el 31 en casa de sus hijos o en su propia casa con ellos, el 22 por ciento viven solos y unos 300.000 mayores en residencias. A medida que avanza la edad y se ven afectados por discapacidad los mayores prefieren vivir con sus hijos. Los mayores se consideran viejos por el deterioro de su salud y no por su edad. El 25 por ciento de los mayores de 65 años tiene algún tipo de discapacidad. A la mitad de los mayores de 85 su discapacidad les impide realizar las tareas básicas diarias. La mayoría de los mayores con discapacidad no recibe ninguna ayuda o la recibe parcialmente de forma insuficiente e insatisfactoria.

Pero los mayores no sólo causan problemas sino que aportan su experiencia a la sociedad y ayudan a sus hijos o cuidan a sus nietos. Tienen una gran preocupación social y participan activamente en tareas de voluntariado, aunque “pasan” de la política partidaria y sindical. Los mayores en su mayoría se declaran religiosos.

La Protección social de los mayores ocupa el capítulo quinto. Es interesante conocer que el número de pensionistas es de 8,5 millones y que en los últimos diez años han aumentado en un millón. El importe medio de la pensión que estaba en el 1999 en 446€ ha pasado a 748€ en el 2009. Es un aumento considerable, por encima del crecimiento de la inflación, pero en términos de Producto Interior Bruto ha bajado del 10,1% en el 1995 al 8,9% en 2005. El gasto de las prestaciones españolas a la vejez (7,9% PIB) es muy inferior al 11% de la media europea. Esta falta de esfuerzo presupuestario provoca para las personas perceptoras de pensiones mínimas el riesgo de pobreza, que ha pasado del 15% en 1998 al 28% en 2008.

Las Conclusiones ocupan el capítulo 6 y recogen de forma sucinta lo que he ido destacando de los capítulos anteriores. Con respecto a la importancia de la familia señala que no existe una política de ayuda a las que cuidan a sus mayores. En la asistencia a los mayores discapacitados se limita a pedir mejores y mayores ayudas, aunque no indica el fracaso de la Ley de Asistencia y por último recalca el riesgo de pobreza que se ha duplicado en 10 años.

Francisco Rodríguez Barragán

http://elguadalope.es/2010/05/04/los-mayores/
Publicado en Forum Libertas, Bitácora de Rebelión Digital, Análisis Digital y Diario Siglo XXI el 05-05-10
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/55429
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=47601&idNodo=-5
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/8526/2010-05-05.html
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=16940

LA MODA DE LAS PRIMERAS COMUNIONES

Con motivo de la primera Comunión de dos de mis nietas alguien dijo: Ya habéis salido de éstas, ya sólo queda la pequeña, aunque para entonces a lo mejor ya no se lleva. El comentario me resultó desagradable y ha venido a mi mente una y otra vez y me ha hecho reflexionar.

Posiblemente la persona que hizo el comentario no conoce el valor de la Eucaristía y no entiende lo que representa que Jesús, en la noche en que iba a ser entregado, nos dejará su propio Cuerpo para estar siempre con nosotros, dentro de nosotros, para formar parte de su Iglesia y anunciar a todas las gentes la buena noticia del amor de Dios y la salvación por medio de Cristo.

Pero la forma en que gran parte de los cristianos celebramos la primera Comunión de nuestros hijos quizás justifica que parezca a los ojos de muchos como una moda, como un acto social lleno de boato, que de alguna manera deja en penumbra, casi hasta hacerlo desaparecer, el hecho inefable de participar por primera vez en la Cena del Señor.

En este sentido yo también deseo que esta forma de celebración sea una moda que pase pronto de llevarse. Es lamentable que este día los niños estén pensando más en los regalos que recibirán, que en el gran regalo de la Comunión. También es lamentable que lo más importante ese día sea el traje o el restaurante o los invitados o las fotografías y que el coste de todo ello resulte una carga onerosa para la familias.

Me apena que para muchos niños su primera Comunión sea también la última, ya que forman parte de esa gran mayoría de familias que se dicen católicas para añadir, de inmediato, “aunque no practicantes”. Pues sería mejor que dejaran de practicar estas fiestas por un acontecimiento cuyo contenido esencial no valoran, ya que no acuden a celebrar cada domingo la Eucaristía y no digamos nada del sacramento de la Penitencia ya que, al parecer, como “todo el mundo es bueno” y ha perdido la conciencia de pecado, nadie se siente necesitado de perdón.

Los padres transmitimos lo que, en la práctica, vivimos día a día y si en ese día a día no hay vivencia religiosa de la fe, de la esperanza y el amor, ni conciencia de pertenecer a la Iglesia de Jesús, resulta difícil, aunque no imposible, que los hijos vivan una vida religiosa, más aún cuando el ambiente social que nos rodea nos lleva a todos a prescindir de cualquier esfuerzo para dominar nuestros instintos y llegar a ser más personas y al ateismo práctico de prescindir de Dios como innecesario por creernos autosuficientes.

La santidad del sacramento de la Eucaristía exige una profunda reflexión sobre el uso que se hace del mismo con motivo de las Primeras Comuniones.

Francisco Rodríguez Barragán




http://elguadalope.es/2010/05/11/la-moda-de-las-primeras-comuniones/
Publicado en Rebelión Digital y Diario Siglo XXI el 12-05-10
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/55723
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=17012&id_seccion=5&PHPSESSID=5678208ec3718efe810679d20cb6270d
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/8697/2010-05-13.html
Publicado en Análisis Digital el 15-05-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=47733&idNodo=-5