martes, 13 de julio de 2010

EL MUNDO Y LOS CRISTIANOS

Todos los regímenes políticos tienden a ampliar su poder sobre los ciudadanos a través de un imparable intervencionismo, que en realidad es puro despotismo, aunque se guarden las formas democráticas. En nuestro caso se ha llegado a forzar el espíritu y la letra de la Constitución, vulnerando principios, derechos y libertades, buscando cambiar de arriba abajo la sociedad, embruteciendo a las nuevas generaciones con la adición al sexo, desde la infancia, para hacerla más manipulable, más dependiente del Estado, en un camino que califican de avance progresista pero que lleva a la servidumbre.

Frente a esta funesta deriva, la Iglesia continúa repitiendo el mensaje de Jesús que no se aviene al espíritu del mundo. Él dijo que quien quiera ser el primero sea el último, el servidor de todos, que sólo la verdad nos puede hacer libres, que amemos a los demás hasta dar la vida por ellos, que para seguirlo cada uno ha de tomar su cruz, llamó dichosos a los pobres, a los perseguidos, a los que buscan la paz, a los que tienen hambre de justicia, a los limpios de corazón. También advirtió a sus seguidores que serían perseguidos por el mundo porque entre el mundo y ellos no puede haber ninguna componenda.

No hay ninguna duda de que los cristianos, aquí y ahora, estamos siendo acosados y perseguidos, aunque la persecución sea solapada y sibilina, pasito a pasito, sin tregua ni pausa. Quieren sacarnos de la vida pública a base de ridiculizarnos, de atacar a la Iglesia, de eliminar nuestros símbolos o rebajarlos a mero folclore costumbrista.

En esta situación hay cristianos que quisieran llegar a algún tipo de acuerdo o transacción con el mundo, otros acusan a la propia Iglesia de tener la culpa por no haberse modernizado, de no ser progresista, y reclaman cambios y reformas para conseguir un mayor reconocimiento por parte de los poderes del mundo. Todo esto te daré si me adoras, dijo el demonio a Jesús.

Es la gran tentación: querer manipular el mensaje de Jesús, adobarlo con las doctrinas que en cada momento parecen triunfantes en el mundo, ya sea la gnosis de los primeros siglos o el marxismo de los últimos. Durarán más o menos pero todos pasan mientras el evangelio permanece. Pero no se puede leer y entender el mensaje redentor de Jesús desde ninguna filosofía ni doctrina humana, sino más bien es su mensaje el que ilumina todo el acontecer del mundo, la luz que las tinieblas no quisieron recibir y que la Iglesia anuncia desde hace dos milenios.

En la segunda carta de San Pablo a Timoteo le dice que vendrá un tiempo en que la gente no soportará la doctrina sana, sino que, para halagarse el oído, se rodearán de maestros a la medida de sus deseos y, apartando el oído de la verdad se volverán a sus fábulas. Las fábulas de hoy son el progreso, la reducción de la natalidad para salvar el planeta, la alianza de civilizaciones, el culto a la madre tierra, el gobierno mundial y tantas otras. Los maestros a medida son los que oscurecen el mensaje de Jesús, proponiéndonos ideas mundanas en lugar del supremo ideal: sed santos como Dios es santo. En esta misma carta también se nos dice que todo el que se proponga vivir piadosamente en Cristo Jesús será perseguido.

Esto de ser perseguidos y ninguneados por el mundo quizás desanime a muchos de seguir a Cristo, pero hay que optar entre Dios que nos ama, que quiere que amemos a los demás, que vivamos de forma honesta y virtuosa y nos ofrece una vida bienaventurada más allá de la muerte, o el mundo que nos incita al egoísmo del tener, a vivir y gozar del placer sin limitaciones, pero que no tiene respuesta alguna para el dolor, el sufrimiento y la muerte.

Vivimos tiempos recios, tiempos de dificultades y luchas, pero los que nos sentimos cristianos, aunque estemos atribulados no estamos aplastados, perplejos, pero no desesperados, perseguidos, pero no abandonados. Si seguimos a Jesús se manifestará en nosotros su muerte, pero también su vida y su resurrección gloriosa. Vamos a seguir proclamando la Palabra, vamos a insistir a tiempo y destiempo, vamos a exhortar y reprochar, con paciencia y con el deseo de instruir en la Verdad, en la Iglesia y con la Iglesia.

Francisco Rodríguez Barragán


http://elguadalope.es/2010/06/12/el-mundo-y-los-cristianos/
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=48267&idNodo=-5
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/9335/2010-06-12.html
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=17295
http://www.rebeliondigital.com/ Publicado el 14-06-10
Publicado en Siglo XXI el 16-06-10
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/57005
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CONTRIBUYENTES

La forma más eficaz para influir sobre las personas es la utilización repetida de determinadas palabras y la cuidadosa exclusión de otras. Sólo parece existir lo que se nombra y lo que deja de nombrarse pierde su presencia entre nosotros. Así está pasando, por ejemplo, con la palabra matrimonio sustituida por pareja que no son la misma cosa.

Otra palabra machaconamente utilizada es la de ciudadanos o ciudadanía para borrar la de españoles, que nos unificaba en un todo reconocible. Pero hoy quiero referirme a otra palabra: contribuyente, el obligado a contribuir con su aportación al mantenimiento de las administraciones públicas. Ningún discurso político comienza llamándonos con esta palabra, que queda relegada a algún pequeño espacio de antefirma en determinados impresos oficiales.

Estamos en la campaña de la Renta 2009 y buscamos ansiosamente en el borrador la casilla final para saber si hemos de pagar o si tendrán que devolvernos lo que nos cobraron de más, pero apenas meditamos en el contenido de la casilla titulada: retenciones y otros pagos a cuenta para darnos cuenta de lo que llevamos pagado. Quizás nos pasa lo mismo con la nómina mensual, de la que solo nos fijamos en el líquido a percibir y pasamos por alto los descuentos que nos hacen, que damos por inevitables.

Ha sido una astuta imposición de la administración el sistema de retenciones mensuales, por el que se obliga a las empresas a actuar de recaudadoras de la hacienda pública, al mismo tiempo que disimula la carga de los trabajadores, de los que cobran a través de nómina, que son la mayoría, en doce plazos mensuales. Con esto el contribuyente no llega a tomar conciencia clara de la cifra con la que contribuye cada año al fisco, que sentiría de otra forma si tuviera que hacer efectiva la totalidad de una sola vez. Si tuviera que hacer el pago anual de una sola vez, se sentiría más contribuyente y por tanto con derecho a exigir de sus gobernantes cuentas claras de lo que hacen con el dinero que ganó con su trabajo.

Pero no es sólo a través del Impuesto sobre la Renta de las personas Físicas como contribuimos a la voracidad fiscal. Pagamos impuestos por cualquier propiedad de la que seamos titulares y, además, tenemos los impuestos indirectos que gravan todas nuestras compras de bienes y servicios de los que tampoco somos conscientes de la enormidad de su importe al resultar disimulados en el precio que pagamos por cada cosa ya sean alimentos, agua, electricidad, vestido, calzado, desplazamientos, vacaciones, carburantes, etc. en porcentajes crecientes.

He leído en algún sitio que trabajamos para el Estado la mitad del año. No sé si será verdad, pero sería bueno saberlo. También sería bueno que utilizáramos más a menudo nuestra condición de contribuyentes y encabezáramos nuestros escritos con el nombre seguido de la expresión: “contribuyente con NIF…” y si llegáramos a saber la cantidad total que pagamos en impuestos directos e indirectos en el año anterior, hacerla constar siempre en nuestras relaciones con la administración.

Llamarnos constantemente ciudadanos, apenas si nos reconoce el parvo derecho a votar cada cuatro años, a unas listas cerradas y bloqueadas que confeccionan las todopoderosas cúpulas partidarias, con lo que damos cobertura democrática a que hagan lo que les parezca durante cuatro años con nuestro dinero.

Reconocernos a nosotros mismos como contribuyentes quizás nos llevaría a entender que los que pagan, mandan y exigen y piden responsabilidades de lo que se haga con nuestro dinero, más aún cuando están hipotecando nuestros ingresos futuros y los de nuestros descendientes, con una deuda creciente que demuestra la ineficacia y el despilfarro de los que repitieron hasta la náusea lo de ciudadanos y a los que tenemos que recordar que somos contribuyentes.

Francisco Rodríguez Barragán


http://elguadalope.es/2010/06/04/contribuyentes/
Publicado en Análisis Digital el04-06-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=48167&idNodo=-5
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/9197/2010-06-04.html
Publicado en mi Bitácora de Rebelión Digital el 07-06-10
Publicado en Diario Siglo XXI y Forum Libertas el 09-06-10
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/56748
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=17251&id_seccion=5&PHPSESSID=95172a02964cee0e5db171138ceef148
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IGUALES Y DIFERENTES

La igualdad es un ideal muy prestigiado desde que Danton lo unió a la libertad y la fraternidad en el viejo lema de la Revolución Francesa, pero, como todas las palabras que se convierten en mitos, su contenido resulta bastante difuso y manipulable, pues aquello que todos creemos saber es lo que necesita ser pensado y dilucidado más atentamente.

La revolución de 1789 quería terminar con los privilegios de unas clases sobre otras, por lo que formuló el principio de igualdad ante la ley que reconoce que todos los ciudadanos tienen los mismos derechos y las mismas obligaciones. Pero dado que en la realidad no todos los ciudadanos se encuentran en situaciones idénticas, la verdadera igualdad tendría que tratar desigualmente a los desiguales, en cuyo momento empiezan los problemas.

Hay políticas que pretenden igualar a los ciudadanos por decreto y el resultado es nefasto, pues se iguala al nivel más bajo y se yugula el camino del esfuerzo y la excelencia. Los capaces, los emprendedores, los mejores, se desaniman y se pierden, o se marchan a otro sitio. Los astutos, los listillos, aprovechan el sistema para copar los puestos políticos en los que no se premia la excelencia sino la adhesión. Es un sistema que necesita mantener el control de todo, empezando por la enseñanza, para mantener a los ciudadanos en una situación de creciente dependencia del poder del Estado. Se produce entonces la máxima desigualdad entre la casta dirigente, los partidos, próximos siempre al poder financiero, y el resto de los ciudadanos.

Este poder igualitarista es decididamente intervencionista, no cree en la sociedad ni le permite que actúe libremente. Decide sobre nuestras vidas, nuestras familias, la educación de nuestros hijos, la asistencia sanitaria, el trabajo, el salario, los impuestos, mientras que no deja de hablar de derechos sociales, de nuevos derechos, de libertad para casarse o descasarse, para gozar del sexo sin responsabilidad, pero al llenarlo todo con su acción política y su propaganda, olvida el sano principio de subsidiariedad por el que el Estado no debe hacer lo que pueden hacer los ciudadanos por sí mismos.

Hablan de educación para la ciudadanía pero esta educación no se enfoca a que los ciudadanos organicen la educación, la sanidad, la vida municipal o las relaciones de trabajo como tengan por conveniente. Tenemos que ser conscientes de que a cambio de alcohol y sexo, como placebos de libertad, estamos permitiendo que el Estado dirija nuestras vidas,

Ahora que el tinglado se tambalea por el fallo de la economía del despilfarro, la corrupción y la ausencia de valores, sería el momento de despertar y rechazar toda política intervencionista e igualitarista, venga del partido que venga, para ser una sociedad de hombres libres y responsables, sin tutores políticos que vivan a nuestra costa, desmembrando España en autonomías.

Necesitamos políticos que entiendan lo que es servir a los que dicen representar y a los que se pueda pedir cuentas de lo que hayan hecho con nuestro dinero. Necesitamos una justicia independiente e imparcial, capaz de hacer efectivo al viejo principio de la igualdad ante la ley. Necesitamos una enseñanza de calidad que premie el esfuerzo y el mérito y que sirva como motor de nuestra economía. Necesitamos emprendedores que presten un servicio al bien común en lugar de listos que se lucran de las necesidades ajenas gracias al cohecho y al soborno. Necesitamos entidades financieras que tengan ganancias, pero no socialicen sus pérdidas a costa de los demás cuando se equivoquen.

Necesitamos trabajar cada día en los valores comunes que nos unen como españoles, sumando sus diferencias y peculiaridades, para acabar de una vez con todo aquello que nos divide, que nos separa, que nos enfrenta, que nos hace desiguales.

Salir de este enorme bache, del que está pendiente toda Europa, exige el esfuerzo de todos, pero el despido de los gestores que nos han llevado a la ruina, como haría cualquier empresa con sus administradores ineficientes.

Francisco Rodríguez Barragán


http://elguadalope.es/2010/05/30/iguales-y-diferentes/
Publicado en mi Bitácora de Rebelión Digital el 31-05-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=48006&idNodo=-5
Publicado en Diario siglo XXI el 02-06-2010
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/56553
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/9108/2010-05-31.html
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TESTIMONIO DE UNA MAESTRA QUE SE JUBILA

En estos tiempos en los que tanto se habla de fracaso escolar, violencia en las aulas, desánimo del profesorado y otras cosas por el estilo, fue una bocanada de aire fresco escuchar lo que dijo mi hermana María Elena, como acción de gracias, en la cena de despedida que le ofrecieron con motivo de su jubilación como maestra hace unos días. Copio a continuación sus palabras:

“Doy gracias a Dios por las Hijas de la Caridad, que me educaron, despertaron en mí lo vocación a ser maestra y me dieron mi primer trabajo. Gracias también a las Hijas de Cristo Rey por permitirme trabajar en este colegio durante más de 30 años, haciendo de él mi segunda casa. Gracias a todos los compañeros con los que he compartido clases, claustros y reuniones. Gracias a mi familia por entender mi dedicación y entrega a este trabajo. Gracias a Dios por ayudarme cada día a ser maestra.

Fui maestra desde el instante en que surgió una pregunta en la boca de un niño y he aprendido que la mejor maestra no es la que más sabe, sino la que mejor enseña.

Algunas de las personas que practicaron esta profesión han ganado el reconocimiento de la humanidad, mas yo represento a aquellos cuyos nombres y rostros se han olvidado hace mucho tiempo, pero cuyas lecciones y carácter se recordarán siempre en los logros de sus alumnos.

He visto a mis alumnos crecer, pasar a secundaria, llegar a la Universidad y convertir en adultos trabajadores. Me he alegrado al saber de sus bodas, del nacimiento de sus hijos y de poder ser también su profesora. También me he entristecido con sus problemas y fracasos y he sufrido con aquellos que enfermaron.

Dejando a un lado los mapas, planos, fórmulas, verbos, historias y libros, no he tenido en realidad nada que enseñar porque mis estudiantes han aprendido por sí mismos y yo he aprendido de cada uno de ellos.

Mis más grandes regalos son los que he recibido de mis alumnos. La riqueza material no es una de mis metas, pero he sido una buscadora de tesoros a tiempo completo, buscando los talentos que a veces yacían enterrados en cada uno de ellos.

Me considero muy afortunada por mi trabajo porque a un médico se le permite traer una vida en un momento mágico, un arquitecto sabe que si construye con cuidado, su estructura puede permanecer siglos, una maestra sabe que si construye con amor y verdad, lo que construya durará para siempre.

He tenido grandes aliados: la inteligencia, la curiosidad, la individualidad, la creatividad, la fe, el amor, la risa y, sobre todo, el apoyo de los padres que me concedieron el gran honor de confiarme sus hijos. A todos ellos les quiero dar las gracias.

No sé cuantos recordarán mi nombre, pero yo llevo a todos y cada uno de ellos en mi corazón. He intentado ser una buena maestra y doy gracias a Dios por todo lo que se me ha regalado, junto a la vocación de maestra, a lo largo de todos estos años.”

Mientras que los asistentes aplaudían, he pensado que en la medida en que sigan existiendo maestros como mi hermana la educación no puede ser un fracaso. Amar a los alumnos con toda el alma es más eficaz para construir personas, que los efímeros planes de estudios, los ordenadores de regalo o las novedosas y problemáticas asignaturas.

Francisco Rodríguez Barragán

http://elguadalope.es/2010/05/25/testimonio-de-una-maestra-que-se-jubila/
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=47931&idNodo=-5
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/56290
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/9034/2010-05-27.html
Publicado también en Rebelión Digital Bitácora FRB
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BAJAR EL SUELDO A LOS FUNCIONARIOS

Me causa tristeza que la medida anunciada de rebajar el sueldo a los funcionarios, sea motivo de satisfacción para muchos españoles que, obviamente no son funcionarios. He sido casi toda mi vida activa funcionario y tengo que reconocer que gozamos de mala fama. Se nos juzga siempre por el comportamiento del peor y todo el mundo tiene la queja de aquella vez que no le atendieron como esperaba o rechazaron su petición o sus alegaciones o le impusieron un recargo.

Para el mundo laboral, cuyos puestos de trabajo pueden perderse en cualquier momento, la estabilidad de lo funcionario es motivo de envidia, aunque nadie sabe lo que puede pasar con todos si la crisis no se soluciona.

La mayor parte de los funcionarios, que verán rebajados sus sueldos, son los administrativos, auxiliares y subalternos con sueldos bastante modestos, mileuristas en la terminología actual. Pero es lo fácil para un Gobierno como éste que, al parecer, ha perdido el norte y la credibilidad.

Las otras victimas del recorte son los pensionistas, cuyas pensiones serán congeladas para el año próximo, pensionistas que mientras estuvimos en activo cotizábamos para pagar las pensiones de los que nos precedieron, confiados en la solvencia y seriedad del sistema de reparto que ahora parece hacer aguas.

De cualquier manera, el ahorro que pretende el Gobierno con éstas medidas me parece harto insuficiente dado el volumen de la deuda española que ni los funcionarios ni los pensionistas hemos generado.

Quizás habría que haber empezado por podar las diversas administraciones de amigos y paniaguados que disfrutan de los mejores puestos, sin haber ganado nunca una modesta oposición. Esta poda posiblemente sería más sustanciosa que la rebaja del sueldo de los auténticos funcionarios.

No hay duda de que el gasto de las diversas administraciones es insoportable, por lo que sería necesaria una reforma a fondo. La tijera hay que meterla en los presupuestos anuales eliminando todos los gastos de dudosa justificación y la plétora de ministerios, vicepresidencias, organismos, empresas públicas, consorcios, etc. que sirven para colocar a los correligionarios pero no parecen que estén contribuyendo al bien común ni al olvidado principio de subsidiaridad, por el cual ningún estamento público debe hacer lo que los ciudadanos pueden resolver libremente.

Seguramente el afán de intervenirlo todo produce más males que bienes, aunque naturalmente los poderes económicos más que ser intervenidos son los intervinientes, a los que el Gobierno se desvive por salvar, aunque sea a costa de los funcionarios y los pensionistas.

Ya que el Gobierno habla de la sostenibilidad, pienso que es llegada la hora de examinar honradamente si es sostenible el sistema autonómico que padecemos. La soberanía nacional reside en el pueblo español y los políticos que nos representan vienen obligados a administrar nuestro dinero con economía, honestidad y transparencia. La inoperancia y la corrupción son inadmisibles.

No podemos pensar que, por formar parte de Europa, son los demás países los que tienen que salvarnos del despilfarro de nuestras administraciones. La Comunidad Europea ha ayudado a España durante mucho tiempo y parecía que había servido para nuestro crecimiento, pero parece increíble que en unos años todo se haya venido abajo y nos encontremos en esta situación tan desagradable.

Como es habitual en este Gobierno, las medidas a tomar no las ha pensado de antemano, por lo que esperamos el “decretazo” para hacernos una idea de la forma en que se van a aplicar estas dos medidas con las que el Sr. Rodríguez Zapatero quiere contentar a la Comunidad Europea y ¡a Obama!.

Francisco Rodríguez Barragán

Publicado en Análisis Digital y Diario Siglo XXI el 19-05-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=47830&idNodo=-5
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/56017
Publicado en Bitácora Rebelión Digital el 19-05-10
http://elguadalope.es/2010/05/20/bajar-el-sueldo-a-los-funcionarios/
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/8842/2010-05-19.html
Publicado en Forum Libertas el 21-05-10
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=17086
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LA CRISIS COMO DESPERTAR

Creíamos vivir en el mejor de los mundos, podíamos consumir sin cortapisas, había créditos baratos para comprar nuestras viviendas, que se revalorizaban de un día para otro. El futuro estaba garantizado por el sistema de pensiones. Para la juventud días de vino y rosas, botellón y sexo seguro, sin compromisos. Ha soplado el fuerte viento de la crisis y todo se ha venido abajo.

Parece claro que todo estaba construido sobre arenas movedizas en lugar de sobre roca firme y segura. Los problemas políticos, financieros, económicos y laborales no se han originado por simples errores de los que gestionan la vida pública, sino por el abandono de los valores morales imprescindibles para establecer una convivencia sostenible, que es mucho más que una economía sostenible.

Era necesario mantener la administración sobre el principio del bien común, con una gestión económica austera y transparente, con la promoción de los valores comunes, con respeto escrupuloso de los derechos de las personas, de las familias y de los grupos sociales, limitando la acción subsidiaria del Estado a aquellos campos en los que resultara imprescindible.

En lugar de vigilar a los actores económicos, se ha dejado vía libre al egoísmo, la codicia y el privilegio de los poderosos, a los que se ha ayudado de forma descarada a costa de todos los demás.

En lugar de una gestión política austera y eficaz, se han multiplicado las administraciones despilfarradoras de los recursos aportados por los ciudadanos, a los que se les quiere exprimir con más impuestos.

En lugar de buscar la solidaridad entre todas las regiones de España, sumando las diferencias en una realidad total más rica, se ha facilitado la desunión, los discursos identitarios, la desigualdad, el enfrentamiento, por motivos electorales.

En lugar de respetar lo derechos de las personas, de las familias, de los grupos sociales, se restringen y manipulan hasta hacerlos inexistentes. Unos gobiernos despóticos deciden sobre lo que tienen que aprender nuestros hijos, aun en contra de nuestras convicciones. Deciden sobre todo, favorecen a los afines, dificultan lo que se les opone. Aquello de que todo está permitido, excepto lo expresamente prohibido se ha tornado en que todo esta prohibido, excepto lo administrativamente autorizado, usando de una sospechosa discrecionalidad.

En lugar de una función subsidiaria se ha establecido una administración intervencionista que crece, se duplica, se contradice, escasamente sujeta a controles, incluido el judicial.

Pero todos, de alguna manera, somos responsables de la crisis y el desastre, adormecidos, hemos pretendido vivir por encima de nuestras posibilidades olvidando el valor de la sobriedad; hemos esperado ser más ricos, sin el valor del esfuerzo, ya que lo que teníamos subía misteriosamente de precio; hemos desechado el valor del sacrificio, del dominio de sí mismo, a cambio de facilidades de todo tipo en el estudio, el trabajo, el sexo; hemos proscrito el compromiso permanente, el amor conyugal como donación y fidelidad, el matrimonio como un serio proyecto de vida en común y nuestras uniones son cada vez más inestables, la natalidad desciende, nos convertimos en una nación envejecida; hemos creído en el “estado de bienestar” que nos cuidaría de la cuna a la tumba y hemos olvidado que si renunciamos a forjar nuestra propia vida con esfuerzo, trabajo y honestidad, caeremos en el triste camino de la servidumbre.

Francisco Rodríguez Barragán

Publicado en Bitácora de Rebelión Digital el 17-06-10
http://elguadalope.es/2010/06/18/la-crisis-como-despertar/
Publicado en Análisis Digital el 19-06-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=48403&idNodo=-5
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/9460/2010-06-18.html
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=17352&id_seccion=33&PHPSESSID=685f50afdf3c24f0c350b62af14355e6
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/57533
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EL TESTAMENTO VITAL

En el diario gratuito 20 minutos leí el otro día, destacado con grandes titulares en la primera página, que 3000 granadinos ya tienen testamento vital. Me parece bien que las personas muestren su voluntad anticipada respecto al trato que desean recibir cuando su proceso de enfermedad les acerque a la muerte.

No sé las que habrán incluido la cláusula recomendada por la Asociación Federal Derecho a Morir Dignamente: “Si para entonces la legislación regula el derecho a morir con dignidad mediante eutanasia activa, es mi voluntad morir de forma rápida e indolora de acuerdo con la lex artis ad hoc” o por el contrario habrán tenido en cuenta el modelo que recomendó la Iglesia: “pido que si por mi enfermedad llegara a estar en situación crítica irrecuperable, no se me mantenga en vida por medio de tratamientos desproporcionados o extraordinarios; que no se me aplique la eutanasia activa, ni que se me prolongue abusiva e irracionalmente mi proceso de muerte; que se me administren los tratamientos adecuados para paliar los sufrimientos”.

Es curiosa la sensibilidad que se ha despertado en nuestros gobernantes sobre la muerte digna al mismo tiempo que se muestran insensibles ante la muerte provocada de tantos niños en el vientre de sus madres, aunque sospecho que la expresión “muerte digna” es como la de “interrupción voluntaria del embarazo”, formas manipuladas y manipuladoras del lenguaje.

Para quienes no creen en el valor sagrado de la vida, ni en su trascendencia más allá de la muerte, es lógico que los niños concebidos sin más causa que el disfrute del placer, sean una carga de la que hay que deshacerse cuanto antes, lo mismo que llegan a ser una carga los mayores enfermos, para los que se prefiere el internamiento asistido y si se agravan sus dolencias una muerte rápida e indolora, “una muerte digna”, en la terminología al uso.

Pero una muerte digna es la que se afronta con dolor pero con serenidad, la que espera de la misericordia de Dios el perdón de nuestras faltas y pecados y el premio a nuestras buenas obras, a todo lo que hemos realizado a lo largo de los años con amor. Incluso para quienes su vida no haya sido digna le cabe la posibilidad del arrepentimiento y el perdón.

Preocuparse por el tratamiento médico a recibir a la hora de la muerte es importante, pero mucho más importante será preocuparse por lo que haya más allá del momento de nuestra partida. Muchos dirán que más allá de la muerte no hay más que la nada, pero ¿y si lo hay?

Creo que más allá de la muerte me espera una vida eterna feliz o desgraciada. Es cuestión de fe, sí, pero aun sin ella es difícil entender que los verdugos y las victimas tengan el mismo final, que nuestros deseos de verdad y de justicia nunca podrán ser colmados, que los que pasaron por este mundo haciendo el bien tengan el mismo destino que los que hicieron el mal.

Nuestra vida y nuestro destino no es el resultado de ninguna ley votada en el Parlamento. No nos hemos dado el ser a nosotros mismos. Hay Alguien en quien vivimos, nos movemos y existimos que trasciende a la creación entera, que nos creó por amor y que al atardecer de la vida nos va a examinar del amor. Aunque muchos no lo crean, este examen es el que hay que ir preparando, día a día, aunque no sea mas que por si acaso.

Francisco Rodríguez Barragán

Publicado en Análisis Digital el 22-06-10
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=48481&idNodo=-5
http://elguadalope.es/2010/06/23/el-testamento-vital/
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/9622/2010-06-26.html
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/57533
Publicado en Bitácora Rebelión Digital el 23-06-2010

VIEJO

El espejo de los grandes almacenes reflejó inesperadamente mi imagen, que me costó unos momentos reconocer. Mi recuerdo de cuando era joven seguía vivo y chocaba con la figura que tengo ahora de viejo arrugado y calvo que me cuesta trabajo aceptar.

Dejé escapar el autobús por no ser ya capaz de correr para alcanzarlo y esperé al siguiente. Pensé que el tiempo cada vez tiene menos importancia para mí. He vivido muchos años corriendo de un sitio a otro, de una cosa a otra, pero ahora comprendo que carecen de sentido tanta agitación, tantas preocupaciones. Tengo que ver la vida con sosiego y aceptar mi insignificancia.

Cuando subo al autobús una joven sudamericana me cede el asiento. No hay duda de que soy viejo. Cada vez con más frecuencia me ceden el asiento y es curioso que, casi siempre, sean los emigrantes quienes lo hacen. Un joven alto y moreno me dijo: siéntese aquí, abuelo. Le agradecí el asiento y el tratamiento.

Antes me desplazaba conduciendo mi automóvil o andando. Ahora ando poco, a pesar de las recomendaciones de mi médico, y conduzco también poco, porque me asustan los atascos de tráfico, las obras constantes, las dificultades para aparcar y la artrosis de mis piernas al entrar o salir del coche. Por eso ahora soy un usuario permanente del transporte público.

Estas cosas que estoy contando quizás no le interesen a quienes las lean, pero serán compartidas por aquellos que les pasa lo mismo y a los que no les pase, ya les pasará.

Los años me han dado experiencia, pero la experiencia no es algo que interese a los demás. Me he dado cuenta del valor de la experiencia de mis padres, cuando he llegado a su edad y quizás lo mismo les pase a mis hijos.

He luchado por muchas cosas que consideré valiosas pero lo más valioso, lo que no ha pasado, lo que sigue ahí es mi familia, el amor de mi esposa, la alegría de haber visto crecer a mis hijos y ahora a mis nietos y sobre todo que seguimos creyendo, que seguimos esperando en Dios, quien nos ha ido llevando por la vida. Al mirar hacia atrás vemos la acción de Dios sobre nosotros, aunque no nos diéramos cuenta de su presencia en aquellos momentos.

Cuando nuestro futuro se reduce y la vejez se va desvelando con sus limitaciones, sus sombras, sus dolores, pienso que ha llegado el momento de irse despojando de todo aquello que ya no va a servirme: los libros que leí pero que no voy a releer, las cosas que coleccioné pero han dejado de atraer mi atención, las posturas que defendí pero no han llegado a cuajar en nada y tantas cosas por las que no van a preguntarme cuando llegue el momento de presentarme ante Dios.

Al atardecer de la vida nos examinarán del amor. ¿Podré suplir en este atardecer el amor que no llegue a dar en tantos años? De cualquier forma la vida eterna que espero no será una recompensa por mis buenas acciones sino un regalo de la misericordia de Dios que nos ha merecido Jesús, a quien siempre he confesado como Señor.

Mientras pueda seguiré mirando la vida, sin odio ni rencor y ofreceré mis pobres reflexiones a quienes se tomen la molestia de leerme.

Francisco Rodríguez Barragán

http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=48592&idNodo
http://elguadalope.es/2010/06/29/viejo/
Publicado en Bitácora Rebelión Digital el 30-06-2010
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/9707/2010-06-30.html
Publicado en Diario Siglo XXI el 06-07-2010

HACIA UNA SOCIEDAD SIN DEBERES

A pesar de todas las protestas la ley del aborto, con su engañoso y rimbombante titulo que habla de salud sexual y reproductiva y de interrupción voluntaria del embarazo, ha entrado en vigor. El Tribunal Constitucional, aunque ha admitido a trámite los recursos presentados, no ha estimado la suspensión cautelar de la Ley.
La salud sexual y reproductiva no va a mejorar con esta ley, seguramente empeorará. Muchas mujeres que abortaron han quedado incapacitadas para asumir una maternidad gozosa. El recuerdo del hijo triturado quizás no le abandone nunca. En cuanto a la eufemística patraña de interrupción voluntaria del embarazo carece de cualquier lógica. El embarazo no es como la lectura de un libro que se puede interrumpir para continuarlo al día siguiente. Interrumpir el proceso de gestación es lisa y llanamente matar al niño concebido y que tal acción sea voluntaria también es dudoso, ya que es claramente inducida desde los poderosos medios de influencia del gobierno que los disfrazan como ejercicio de un derecho de la mujer. ¡Convertir el asesinato en un derecho muestra el grado de envilecimiento moral en que nos estamos sumergiendo!
Desde hace años hay desplegada una amplia campaña de difusión de los métodos anticonceptivos que ha demostrado suficientemente sus desastrosos resultados. Ni los anovulatorios ni los preservativos han evitado la monstruosa cifra de abortos, en vista de ello se lanza la píldora del día después que seguirá el mismo camino. En vista de que el número de abortos sigue aumentando el Gobierno amplía el aborto y lo convierte en un derecho. El loby de las clínicas abortistas ha conseguido que ninguna investigación pueda inquietarlos.
El gran designio “progresista” es la eliminación de las normas morales que difundió el cristianismo. Para ellos no hay más ley moral que la que diga el Parlamento. Ni siquiera se preguntan sobre la justicia de sus leyes. Si han conseguido la mitad más uno de los votos del Congreso mediante cualquier trapicheo con los partidos minoritarios, la voluntad del partido gobernante se nos impone por encima de todo.
Son esas normas morales que quieren dejar suprimidas las únicas que podrían evitar el terrible drama de una población que envejece o de una economía que se va a pique. La consigna voceada por los políticos ha sido consumir y gozar. Todos los ciudadanos tendrían que estar encantados con unos gobernantes que les proponen gozar sin responsabilidades, copulad sin miedo, consumir de todo y votadnos para que podamos seguir gozando del poder y “haciéndoos felices” con nuevos derechos.
Es la nueva ética indolora sin deberes, sin culpas, sin pecados, lo que se ofrece y esta ley del aborto es una pieza más de este designio. Quizás la economía echará abajo este montaje y despertemos, pero el daño ya está hecho. Cómo podremos recuperar el sentido del deber frente a tanto derecho, el valor del esfuerzo frente a la comodidad de obtenerlo todo sin esfuerzo, la responsabilidad de construir la propia vida frente al estado de bienestar que viene obligado a subvenir a todas nuestras necesidades.
Además de los niños que no llegarán a nacer están los jóvenes que no llegarán a formar una familia estable, que no entenderán el valor del dominio de sí mismos, de la continencia, de la fidelidad. Ya ha dejado de hablarse de matrimonios, solo se habla de parejas. Curiosamente se habla de matrimonio para lo que no es ni puede serlo, el matrimonio homosexual.
Mientras tanto tratan de forma descarada de deformar la conciencia de los niños desde la infancia. Todos los que han querido fabricar un mundo diferente siempre han incluido entre sus objetivos la educación desde la infancia a cargo de sus doctrinarios.
No es sólo la ley del aborto lo que me preocupa sino la deriva general de nuestra civilización empeñada en construir una sociedad sin Dios.
Francisco Rodríguez Barragán

Publicado en Análisis Digital el sábado 10-07-10 http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=48747&idNodo=-5 Publicado en el Guadalope el o7-07-2010 http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/9895/2010-07-09.html Publicado en Bitácora Rebelión Digital el 08-07-10 http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=17541