miércoles, 25 de mayo de 2011

ATEOS Y CREYENTES


A PROPÓSITO DE ALGUNOS “INDIGNADOS”
Esa confusa plataforma de “indignados” que dice reclamar una democracia real, en la manifestación que protagonizaron el pasado día quince en Granada hasta más allá del horario que se le había concedido, trataron de boicotear una procesión de la Virgen del Rosario con gritos y consignas antirreligiosas.
Pienso que fue sólo una parte de los manifestantes los que demostraron su falta de respeto por una manifestación religiosa, pero es curioso que se aproveche cualquier ocasión para agredir a los cristianos, ya sea desde la izquierda partidaria como de la extrema izquierda anti sistema, pronta siempre a la algarada, la protesta, la bronca y el insulto.
Los que se proclaman ateos siempre andan atacando a los que se confiesan creyentes cristianos. Quisieran imponer a todos su ateísmo, una especie de contra-religión, de la que son ardientes propagandistas.
Hay mucha gente cuya postura es de indiferencia religiosa, viven como si Dios no existiera, aunque es posible que en cualquier momento se produzcan circunstancias que les hagan reflexionar y volverse a Dios. Normalmente no atacan a los cristianos, aunque alguna vez se burlen de ellos.
El ateísmo militante es el que resulta peligroso para los cristianos ya que están dispuestos a hacernos la vida imposible. Seguramente por aquello de “si Dios no existe, todo está permitido”, buscan eliminarlo para poder gozar del poder y de los placeres, sin que exista ninguna instancia que les recuerde que Dios es la garantía del hombre, la referencia inamovible sobre el bien y el mal.
Cuando reflexiono sobre los ateos pienso que, si no creen en Dios se toman demasiado trabajo contra algo inexistente, pero si existe todo su esfuerzo en combatirlo es ridículo y patético. Creo que lo que quieren es poner al hombre en lugar de Dios y gritar con el demoniaco “no te serviré”. Hay una especie de nostalgia de Dios que quieren sustituir por la divinización de la razón, la ciencia y sobre todo por el poder de decidir sobre la vida y la muerte de los hombres.
Esta especie de cruzada antirreligiosa tiene sus “autores intelectuales” alojados en todos los centros de poder, ya sea en los ministerios del gobierno, en las universidades o en las Naciones Unidas. Se han dedicado a socavar los fundamentos sociales y los valores morales a través de sus programas educativos. Recordemos que todas las leyes que regulan la educación en España son socialistas.
Quizás piensen que debidamente debilitada la familia y diluidos los valores morales en una sociedad que no tiene más horizonte que el placer sin responsabilidad y el consumo compulsivo, está maduro el proceso de acabar con todo lo religioso. Es lo que van haciendo con sus leyes de títulos rimbombantes, eufemísticos y engañosos.
El evangelio, como siempre, nos advierte que los hijos de las tinieblas son más sagaces que los hijos de la luz, pero también nos dice que hay que ser prudentes como las serpientes y sencillos como las palomas. Los cristianos tenemos que ser sencillos y transparentes en nuestra vida familiar, profesional y ciudadana, pero también prudentes para evitar que nuestros adversarios, que también son nuestros hermanos, logren sus objetivos.
La prudencia es la virtud que consiste en discernir lo que es bueno o malo y actuar con sensatez y eficacia.
Francisco Rodríguez Barragán

http://elguadalope.es/2011/05/19/a-proposito-de-algunos-indignados/
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=53142&idNodo=-5
http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/71087/ateos-y-creyentes
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/15272/2011-05-19.html
http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=20103

¿QUÉ PODEMOS ESPERAR DEL PARTIDO POPULAR?

Las elecciones del domingo pasado han deparado una memorable derrota al partido en el gobierno y la correlativa victoria del Partido Popular, que puede ser el preludio de otro resultado parecido en las próximas elecciones generales. El ejercicio democrático del voto ha demostrado su validez para cambiar unos gobiernos por otros sin violencia.
Pero después de las elecciones los problemas que nos aquejan siguen ahí, esperando que los nuevos gobernantes se pongan a resolverlos en las numerosas parcelas en las que mandan o van a mandar.
La insoportable deuda que pesa como una losa sobre las administraciones municipales y autonómicas, sin duda se verá incrementada cuando se produzca el traspaso de poderes y afloren todas las factura pendientes, la caja vacía y una nómina de personal repleta de amigos y familiares de los que cesan, que se han cuidado de dejarlos “colocados de plantilla” antes de marcharse. Será una especie de quinta columna dispuesta a torpedear a los que llegan.
Revertir la situación de despilfarro y corrupción vigente es tarea urgente e imprescindible, pero en modo alguno fácil. Todas las irregularidades que detecta el Tribunal de Cuentas no parece que tengan consecuencias para los que las cometen, ni he oído que el Ministerio Fiscal haya tomado ninguna decisión al respecto.
Sería lamentable que los que han gestionado de forma inadecuada el dinero de los ciudadanos, los que se han enriquecido utilizando sus cargos, los que han beneficiado a sus familiares y amigos en perjuicio de los demás, no tengan otro castigo que cesar en sus cargos. Los resultados electorales no pueden exonerar a los perdedores ni a los ganadores de sus responsabilidades de mal gobierno.
En los meses que faltan para las elecciones generales, el Partido Popular tiene que demostrar su voluntad de cambio, de saneamiento de la vida pública, de reforma de todo aquello aquejado de un funcionamiento lamentable. Las grandes decisiones hay que tomarlas en el primer trimestre de cualquier mandato, sin dudas ni dilaciones.
Muchas de las competencias autonómicas como la educación, la sanidad o la política social, necesitan una mano firme que las reconduzca a sus verdaderos fines que no son precisamente ponerlas al servicio de la ingeniería social preconizada por Rodríguez Zapatero y su equipo. Muchas leyes autonómicas deben ser derogadas para devolver la libertad y la responsabilidad a las personas, a las familias, a la sociedad civil, cansada de imposiciones y prohibiciones.
Es necesario despolitizar a las entidades de ahorro, sin entregarlas como premio a las entidades financieras y bancarias, esas entidades que han conseguido “socializar” las pérdidas derivadas de su mala gestión al mismo tiempo que mantener y aumentar sus intereses privados.
También es imprescindible podar las autonomías y los municipios de todas las empresas públicas, fundaciones, asociaciones y “chiringuitos” donde derivar dinero del presupuesto y acomodar a amigos, parientes y conmilitones sin el necesario control del gasto. Reponer en sus funciones de control presupuestario y de legalidad a Secretarios e Interventores, sin que sus cargos resulten dependientes de las mismas personas a quienes deben de controlar, sería una medida a aplaudir.
Nuestra desgracia sería que el cambio de partido gobernante no significase el fin de corrupciones y corruptelas, sino la sustitución de unas personas por otras para seguir haciendo lo mismo.
Si ganan en las generales tendrán que hacer muchas más reformas. Vayan entrenándose en los meses que faltan para ello.
Francisco Rodríguez Barragán

http://elguadalope.es/2011/05/24/%c2%bfque-podemos-esperar-del-partido-popular/

http://www.diariosigloxxi.com/texto-diario/mostrar/71290/que-podemos-esperar-del-partido-popular

sábado, 21 de mayo de 2011

TIEMPO PASCUAL, TIEMPO DE ESPERANZA


Estamos en tiempo pascual, el tiempo en el que cada año los cristianos celebramos la resurrección de Cristo. No se trata de rememorar un suceso del pasado, pues si Cristo ha resucitado ya no muere más y vive para siempre para salvarnos.
Aquel hombre, Jesús de Nazaret, que fue condenado a muerte por proclamarse el Mesías, el Hijo de Dios, murió en la cruz y fue sepultado pero resucitó al tercer día, tal como lo había anunciado y se apareció a sus discípulos que comprobaron que no era ningún fantasma sino el Señor resucitado.
Si no hubiera resucitado no pasaría de ser un personaje interesante de la antigüedad, pero si resucitó, tenemos la garantía de que cuanto dijo es verdad, que Dios nos ama, que está dispuesto siempre al perdón y la misericordia en la medida que amemos y perdonemos a los demás, que se ha quedado con nosotros como cabeza de la Iglesia, que nos alimenta con la Eucaristía, que siempre está a favor del pobre, del que sufre, del marginado, que Él mismo es el camino, la verdad y la vida. Seguirlo es alcanzar la vida eterna, la vida que no termina con la muerte sino en los brazos de Dios.
Los cristianos creemos en Cristo por el testimonio de aquellos discípulos que no dudaron en perder su vida por confesar que Jesús es el Señor. Su testimonio se ha ido transmitiendo en la Iglesia, de generación en generación, desde hace dos mil años.
Si leemos el libro de los Hechos de los Apóstoles, comprobaremos que aquellos hombres, miedosos y pusilánimes durante la pasión y muerte de Jesús, pierden el miedo y enseñan públicamente que aquel hombre condenado y muerto, ha resucitado porque era verdaderamente el Hijo de Dios. Las autoridades judías se opondrán a su predicación y los perseguirán, pero al huir de Jerusalén y dispersarse comienza la propagación del evangelio.
Mucha gente piensa que con la muerte todo se acaba, pero no obstante están empeñados en salvar al mundo con sus ideologías, con sus soluciones políticas, con sus revoluciones sociales. Vano empeño que se ha saldado muchas veces con más dolor, injusticia y muerte. De nada nos sirve luchar por un mundo en el que ya no estaremos.
En cambio el mensaje de amor que brota del evangelio, la esperanza a la que nos llama de una vida eterna y feliz, la fe que nos ayuda a mantener el rumbo mientras caminamos por este mundo, llena de sentido la vida de los cristianos dentro de la Iglesia.
Aunque en estos cincuenta días desde la Pascua celebremos especialmente la resurrección de Cristo, la celebramos todos los días del año en la Eucaristía, en la oración y en el amor a Dios y a los demás.
Francisco Rodríguez Barragán

http://elguadalope.es/2011/05/14/tiempo-pascual-tiempo-de-esperanza/
http://www.conoze.com/doc.php?doc=9360
http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=53080&idNodo=-5
http://www.camineo.info/news/207/ARTICLE/15294/2011-05-20.html